¡Cuatro meses!

Sigue pasando el tiempo demasiado deprisa. Ya María tiene cuatro meses, permanece más tiempo despierta y atenta a todo lo que ocurre a su alrededor, y es tiempo de cambios:
-          Del capazo a la silla
-          Del moisés a la cuna
-          De la bañera-cambiador (en su cuarto) a la bañera más grande dentro de la bañera (en el cuarto de baño)
-          Comenzamos con los cereales sin gluten, durante la primera semana sólo en la última toma de la noche y después también por la mañana.
-          Se va introduciendo la fruta, primero zumito de naranja a cucharaditas.
-          Los batones y faldones van dejando paso a los trajecitos y rebequitas.

Tenemos establecida su rutina para dormir a partir de las 20:30 h aprox. Comenzamos por el baño, con música relajante y gel “dulces sueños”, luego un masajito con cremita, el pijamita, biberón y a dormir. Se suele quedar dormida entre las nueve y las diez, hasta las cinco de la mañana aproximadamente.
Continúan las vacunas, este mes le tocaba la de los cuatro meses por la seguridad social.
Lleva desde los tres meses (se le aprecian dos rayitas en la encía inferior), rabiando con los dientes; se mete las manos constantemente en la boca, a veces incluso le provoca regurgitación, tiene mucha baba.
Aunque los cambios no sólo son para María. Mi cuerpo (¡gracias a Dios!) se va recuperando,  vuelvo al trabajo… Se terminó disfrutar las 24 horas de ella, pero gracias a la Ley 39/1999, de 5 de noviembre, para promover la conciliación de la vida familiar y laboral de las personas trabajadoras y el art.37.5 del Estatuto de los trabajadores, mi turno será fijo de mañana.