Terminando vacaciones

Este sábado me incorporo de nuevo al trabajo y ¡menudas vacaciones!, la semana pasada nos fuimos los dos solitos, a Lucena (Córdoba), para examinarme de las pruebas libres de T.C.A.E. (Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería), aunque no tengo mucha esperanza de aprobar, ya que no he estudiado, pero nos ha servido para cargar un poco las pilas, ha sido nuestro viaje anual (hace dos años fuimos a Córdoba, capital y pudimos ver los patios, que a mí me encantó, degustar los flamenquines y el salmorejo, el año pasado fuimos a Huelva, aprovechando la oportunidad visitamos un pueblecito de Portugal y me compre mi anilla portuguesa que tantas ganas tenía y éste año tocaba Lucena), nos llamó la atención la cantidad de personas con mascarillas (por la alergia) y el olor a aceite, el tiempo estuvo regular con lluvia y un poco de fresco, nos sentíamos rarísimos sin nuestras pequeñas, tanto que nuestro cuerpo ya esta programado y nos despertamos a las seis de la mañana (hora del biberón de Irene) y de nuevo nos quedamos dormidos.

Cuando llegamos al hotel se habían equivocado y nos habían puesto dos camitas juntas, pedimos una de matrimonio pero cuando Rafa se tumbó y los pies se le salían, tuvimos de nuevo que pedir las dos camitas.

Los exámenes este año han cuadrado en martes y miércoles, y por la tarde, así que el día que aprovechamos fue el miércoles para dar una vuelta, nos recomendaron visitar la calle Jaime (como mi hermano) y aquí como en Granada, también es típico con la bebida degustar una tapa, así que comimos bien barato ya que solo pagamos la bebida, nos encantaron "los bolos" que es típico del lugar, son entre albóndigas y hamburguesas, ¡deliciosos!, la patrona es Nuestra Señora de Araceli, razón por la cuál, muchísimas mujeres tienen este nombre.

 

Llegamos el jueves casi a las doce de la noche, mi madre se había quedado a dormir la noche anterior sola con las dos y estaba deseando que llegásemos para irse a su casa, llegamos y estaban las dos dormidas y por la mañana siguiente en cuanto fui a despetar a María para llevarla al colegio, l

o primero que me dijo fue " y papá", le dije: está dormidito cielo, está cansado, te voy a llevar yo al cole, te he echado de menos... y me dijo" llámalo, llámalo", fue a despertarlo y le dijo "papa yo llamando papá papá y abuela decía  ya va a veni", tiene pasión de padre.

Rafa entraba a trabajar de tarde, tenía que quitarse los puntos de la vasectomía a las once y a las once menos cuarto tenía yo cita con la Ginecóloga Luisa Molina Gil, ya que el hematólogo me recomendó que fuera de nuevo a que me viesen ya que me pondría un gotero de hierro esa misma tarde, pero mientras no solucionase las pérdidas de sangre no me recuperaría, pero todo cambió en cuanto me vio la doctora, viendo los informes que llevaba y mi historial desde septiembre (que di a luz) hasta ahora, pasando por varios ginecólogos de Residencia, San Carlos, Julio Sancho pensó que estarían en lo cierto y sería un desajuste hormonal pero en cuanto me exploró me recomendó hacerme un legrado y una histeroscopia, el quirófano estaría preparado a las 14.30 en la Clínica La Salud, así que Rafa no pudo ir a quitarse los puntos (se le han caído esta semana), tuvo que llamar al trabajo para pedir el día, llamé para anular el gotero que me iban a poner por la tarde (que me lo pondrán mañana), avisar a mi madre para que se quedase con Irene, que mi padre recogiese del cole a María... no habíamos deshecho las maletas, cogimos lo justo y necesario y marchando para la clínica, me sacaron sangre, me hicieron un electro (el preoperatorio), nos subieron a la habitación (308) y aproximadamente a las cuatro me operaron, no me enteré de nada, fue con anestesia general y cuando desperté al primero que vi fue a Rafa y a su madre, me encontraba muy bien solo me dolía la garganta, por la noche tuve fiebre y vino el médico de guardia ya que la fiebre era debido a placas en la garganta, el sábado por la mañana me dieron el alta, María me decía "por que tienes pupita Mamá", tenía ambos brazos con hematomas, de ponerme las vías, sacarme sangre... "te voy a curar y poner cremita", llegamos a casa nos duchamos los cuatros y fuimos a ver a mi sobrino Rafa, aunque nos perdimos la ceremonia, pero llegamos a tiempo para verlo vestido de comunión antes de que se fuera a la celebración

Ahora solo esperar que vengan los resultados, pero según le pareció a la doctora, podían ser restos de placenta, increíble que después de que me hayan visto tantos médicos ninguno viese nada, solo sé que me voy encontrando con más fuerza, ya que estaba últimamente demasiado cansada. 

Para compensarlo Irene ha dicho "papapapapa", ¡menudas vacaciones, primero mamama! María dice que Irene está aprendiendo hablar porque ella la está enseñando.

Ahora necesito unas vacaciones para recuperarme de éstas , pero tendré que esperar a la segunda quincena de Agosto, a no ser como siempre digo, que me toque una lotería y cambie nuestras vidas para mejor y no pido dinero, me conformo con un trabajo en el que me sienta motivada profesionalmente, tenga calidad de vida y me paguen puntualmente.