No paran de llegar regalos, ésto es solo una pequeña muestra ya que durante todo el embarazo he ido recibiendo muchísimas cositas, muchísimas gracias.
¡Menuda cesta, no le falta de nada! la tata Carmen, como siempre, cuidando hasta el último detalle,menuda presentación, los baberos son de fabricación propia ¡preciosos! aunque no se aprecia en la foto trae una mochila (que María no tardó en ponérsela) de productos Nenuco, dos leotardos ( uno tenía que ser lila, de mi color favorito), bodys, polainas, un peluche, una pasada, gasitas, un pijama, una ranita...
La tata Mili, con su buen gusto, tiene que estar guapísima con este conjunto.
Para que se acuerde de la tata Sonia, a la hora del baño y que vaya oliendo a gloria con los productos Mustela.
Otro gran regalo, que no esperábamos de otras tatas, es los pañales y la leche durante un año, es una gran ayuda, dada nuestra situación económica.
No puedo decir que no tenga ropita, entre la que nos han dado, los batones que me ha prestado mi prima y la nueva que nos han regalado, tiene para llevar cada día una prenda y no repetir.
Aunque para regalos mis dos niñas, son una bendición, ellas son el regalo más grande.